Entrada número 50. De un blog que si bien no actualiza con regularidad, no es demasiado bueno y no tiene muchos seguidores, para mí es especial. En el sentido de que en él ya se guardan varias experiencias de mi vida que resultan importantes para mí, por lo que esto también es especial. Una entrada conmemorativa que no es sino un agradecimiento a todas las personas que aunque sólo fue una vez se pasaron por el blog, leyeron y disfrutaron de esto tanto como yo (¡sobre todo las que comentáis!).Por otra parte, estoy encantada de poder celebrar estás cincuenta entradas con una noticia que aunque es pequeñita para mí ha significado un gran paso. Un paso que me acerca poco a poco a mis sueños. Y es que hace unas semanas presenté un relato al Certamen Compitalia de mitología y cultura clásica y al parecer me han dado el segundo premio en, cómo no, la categoría de redacción :). Es la primera vez que presento algo a algún concurso y llevarme un segundo premio la primera vez que lo hago para mí es toda una victoria. Digamos que ha sido como el empujón que necesitaba.
Y esto es la entrada cincuenta, corazones. Voy a tratar de actualizar más seguido (aunque no prometo conseguirlo) y a daros mi dosis de paranoias semanalmente. ¡Un beso para todos!


